Todos eran amables.

El lugar era fantástico y también increíble, los espacios públicos estaban muy limpios y el personal era brillantemente acogedor. La distancia al aeropuerto era solo de 15 km. Las habitaciones eran funcionales de un tamaño decente, con una ducha estupenda.

Las habitaciones eran compactas y súper limpias con aire acondicionado y con una cama doble.

El personal era desorganizado.

Un hotel estupendo, una ubicación bonita en el corazón del soho y un personal eficiente. Había un climatizador y un secador de pelo en las habitaciones, lo que las hacía sorprendentemente nuevas y prácticas, con un buen diseño. El baño era espacioso y las camas eran súper cómodas. Situado en el corazón de la ciudad. Para la cena, fuimos a Burger and Lobster, que estaba a un corto paseo del lugar.

La ubicación del hotel es perfecta, justo en el corazón de un bullicioso barrio con una gran cantidad de bares, restaurantes y teatros. También está muy cerca de las estaciones de Picadilly Circus y Leicester Square, lo que facilita el transporte en la ciudad. Además, el servicio y la limpieza son excelentes, y el personal es amable y servicial. La presencia de un bar en el hotel es genial, ya que puedes disfrutar de una cena o desayuno allí. También me encantó el happy hour de vinos y quesos a partir de las 17 horas.

Las habitaciones son extremadamente pequeñas, especialmente las individuales. No hay suficiente espacio para acomodar la ropa y la falta de armarios es una desventaja.

Habitación súper limpia con maravillosas vistas y una cama doble y aire acondicionado.

Todos eran acogedores.

La habitación era moderna y compacta, además contaba con un espacio de almacenamiento, maravillosas vistas y además aire acondicionado. La ubicación era céntrica, genial para un teatro y una galería, situados cerca del hotel.

Su ubicación era céntrica, justo al lado de la Puerta al Barrio Chino. Nos han gustado mucho de verdad sus habitaciones con una buena ducha.

Excelente ubicación en el centro, rodeado de bares, restaurantes y teatros. Buen servicio y personal amable. Bar con opciones de cena y desayuno, además de happy hour con vinos y quesos. Habitaciones con cafetera y TV. Cerca del metro. Volvería sin dudarlo.

Me ha encantado todo, os lo aconsejo. Es un lugar muy guay para visitar algunas de las atracciones que hay que ver en Londres.

Mi estancia fue relajante para un viaje rápido de negocios, tal y como me esperaba. Este hotel boutique estaba a 300 metros de la estación de metro. Habitaciones con maravillosas vistas.

La ubicación era fantástica, la Galería Nacional estaba a poca distancia andando del hotel. Las camas eran super cómodas, la habitación bien cuidada y funcional.

Lo mejor del hotel fue el excepcional servicio que recibimos. Desde el momento en que llegamos, nos trataron con amabilidad y atención. ¡Incluso nos dieron un regalo por el cumpleaños de mi esposa! Las habitaciones eran modernas y muy limpias, y el personal, especialmente Rocío en la recepción, fue increíblemente amable y eficiente. Nos ayudaron en todo lo que necesitamos y hasta nos regalaron el desayuno debido a que la cafetería estaba en obras. Además, la ubicación del hotel era perfecta, ya que estaba a solo unos minutos caminando de los principales puntos turísticos y rodeado de bares y restaurantes.

El personal es amable y servicial. Las habitaciones son modernas y cómodas, con un buen tamaño. La ubicación es perfecta para disfrutar de la vida nocturna y explorar la ciudad. Los vinos y quesos gratuitos por la tarde son un bonito detalle. En general, una estancia muy agradable.